Cada vez que termina un curso de catequesis de Confirmación, salgo contento, pero con la idea que no ha sido suficiente para estos chicos, es entonces cuando tengo conciencia de que, el que construye es Otro, quizás yo no vea lo que ha ocurrido en algunos de ellos en este tiempo, pero el que no lo vea no significa que no haya sucedido. La ternura de Dios me regala ciertas caricias en los comentarios de cuatro de los chicos que me han escrito. A continuación, quiero compartir un conmovedor testimonio de uno de los chicos, que reúne en su contenido parte de lo que los otros me dijeron:
“Después de haber recibido el sacramento de la Confirmación, quiero agradecerte no solo tu empeño por transmitirnos el mensaje cristiano, sino también la paciencia que has tenido desde el primer día, la confianza que nos has dado y el tiempo que nos has dedicado. Gracias por esas charlas que me han ayudado a que en este tiempo , haya crecido espiritualmente. No sé exactamente cómo explicarte el papel tan importante que ha representado esta catequesis para mi. Por tanto, he optado por hacer una lluvia de palabras que puedan definirlo: amor, fe, bondad. El amor porque has hecho de Él, el pilar de todo lo que nos has enseñado y porque nos lo has enseñado no solo con palabras, sino también con acciones; La fe porque nos has hecho ver que con ella, podemos subir montañas, derrumbar muros y construir puentes; La bondad porque es un adjetivo que te caracteriza. Quiero dar gracias a Dios porque hemos tenido la gracia de que ponga en nuestro camino, a un catequista como tú, con fuerzas y ganas de predicar. Que nos ha guiado a que sea posible acoger al Espíritu Santo en el corazón y recibir sus siete dones: la sabiduría, la inteligencia, el consejo, la fortaleza, la ciencia, la piedad y el temor de Dios. Sin más, decirte que me llevo el mensaje de Jesús, que conocemos el Reino de Dios y que sé la responsabilidad que recae al dar este paso de confirmarme .Gracias por ser para mi instrumento de Dios para aprender a mejor pensar, sentir y a actuar desde el amor y la fe.”
Quiero dar las gracias a nuestro querido párroco D. Agalac, por darme la ocasión de acompañar al grupo adulto de catequesis de Confirmación.