Celebramos hoy a uno de los grandes santos de la historia de la Iglesia. Y santo y grande, porque viviendo un momento de nuestra historia donde la fe no era el centro de las acciones eclesiales en muchas cosas, Francisco, despojándose de todo, dando un “sí” al buen Cristo crucificado, reconstruye la misma Iglesia, desde dentro, con su vida, su entrega y su testimonio. Sigamos su ejemplo y reconstruyamos la fe desde nuestra propia fidelidad a Dios.
Confirman su fe y renuevan su compromiso cristiano de amor y bondad
Cada vez que termina un curso de catequesis de Confirmación, salgo contento, pero con la idea que no ha sido suficiente para estos chicos, es entonces cuando tengo conciencia de que, el que construye es Otro, quizás yo no vea lo que ha ocurrido en algunos de ellos en...